La salud emocional está vinculada a nuestro bienestar en todos los ámbitos de nuestra vida, esto igualmente incluye los espacios de trabajo.
Un lugar de trabajo saludable es aquel en el que los trabajadores y los gerentes colaboran en la aplicación de un proceso de mejora continua para proteger y promover la salud, la seguridad y el bienestar de todos los trabajadores y la sostenibilidad del lugar de trabajo.