La retención de personal históricamente ha sido un tema de suma importancia en las organizaciones alrededor del mundo. Sin embargo, hoy en día se ha convertido en un verdadero reto dado que el escenario global actual es más complejo y competitivo. En los últimos tiempos la transformación se ha acerlerado debido a la turbulencia económica (que impacta directamente en la empleabilidad y compensación), los cambios sociales y demográficos (por ejemplo, la integración de múltiples generaciones en un mismo lugar de trabajo), así como las crecientes transformaciones organizacionales (fusiones y adquisiciones).
Y es así que las organizaciones se han vuelto más conscientes de que son los colaboradores quienes tienen la clave para lograr la competitividad, ya que está en su talento y expertise la ventaja frente al mercado. Pero a su vez, las personas – sobre todo las nuevas generaciones – están asignando al trabajo un valor distinto al que se venía percibiendo, haciendo en algún punto más exigentes las condiciones para permanecer tanto tiempo en un mismo lugar de trabajo.
Por lo tanto, las prácticas de retención de personal se han vuelto cada vez más necesarias y estratégicas, aunado a los altos costos que implica la movilidad y la rotación de los colaboradores y a las repercusiones directas sobre todo tipo de recursos –económicos y humanos-. De hecho, hay estudios que estiman que casi 59 millones de empleados abandonaron sus puestos de trabajo en 2015 en los EE.UU., lo que se traduce en un alto costo para los empleadores; incluso las cifras señalan que los costos pueden llegar a representar entre 50% al 60% del salario anual de los colaboradores.
En miras de enfocar los esfuerzos a lo que los empleados están valorando, Great Place to Work® realizó un estudio a partir de los resultados de la Encuesta de Confianza Laboral (Trust Index©) de las Mejores Empresas Multinacionales para Trabajar en el Mundo. Para esto, se realizó un ejercicio de correlación a partir del cual se obtuvieron aquellos factores de la encuesta con mayor relación a la sentencia “Deseo trabajar aquí por un largo tiempo”.
Los principales hallazgos encontrados en el estudio revelan que estas empresas no sólo promueven experiencias de confianza, sino que también generan un sentido de pertenencia, estimulan la iniciativa y proactividad orientada al logro y transforman a los colaboradores en sus verdaderos “embajadores” frente al mercado.
¿QUÉ VALORAN LOS COLABORADORES DE LAS MEJORES MULTINACIONALES QUE ELIGEN PERMANECER EN SUS LUGARES DE TRABAJO?
Por un lado, el deseo de seguir trabajando en los lugares que son Excelentes se relaciona con una fuerte sensación de orgullo ante los logros individuales y del equipo, generando en las personas un sentido de propósito y trascendencia en ellos mismos y hacia la comunidad. A su vez, esto las inspira a estar siempre presentes buscando “dar más de sí mismas” en pos de la organización.
Asimismo, la hospitalidad es un aspecto importante para la retención de personal. El hecho de que los colaboradores se sientan “en casa” cuando acuden a sus trabajos, y que perciban un ambiente cálido, amigable y fraterno, facilita la integración entre pares y contribuye a la consolidación de la confianza entre todos.
Finalmente, los colaboradores valoran tanto recibir un trato justo e imparcial -por ejemplo, en el reconocimiento de su trabajo a través de la participación de las ganancias-, como percibir un interés genuino por su cuidado como personas – al sentir que las animan a equilibrar su trabajo con el resto de aspectos de sus vidas-.
¿QUÉ ROL CUMPLE LOS LÍDERES FRENTE A ESTE ESCENARIO?
Algunos de los aspectos mencionados se relacionan directamente con el liderazgo – credibilidad, respeto e imparcialidad – y por eso son los líderes, acompañados por la organización, quienes tienen que focalizar esos puntos para tener mayor impacto directo en las percepciones.
Por otro lado, en el caso de la camaradería – hospitalidad – a pesar de que dependa de los vínculos entre los compañeros, el papel del líder es importante en pos de crear un clima propicio para que las personas disfruten trabajar desde el día en el que entran a la organización.
Y, por último, para entender de qué forma los líderes pueden aportar directamente a que los colaboradores sientan cada vez más fuerte el orgullo por su trabajo, equipo y por la organización, se complementó el estudio analizando la correlación de las sentencias relacionados con el orgullo, con el resto de los temas incluidos en la encuesta.
Este estudio muestra cuan importante es inspirar a los colaboradores en el día a día, ya sea a través de su filosofía, cultura y misión, como por medio de la valoración de las contribuciones individuales y colectivas. Los líderes tienen que transmitirle a cada colaborador el impacto de su trabajo – desde el más estratégico hasta el más operativo- en la misión de la empresa y en el entorno organizacional.
Para esto, es necesario que hagan uso de sus habilidades gerenciales, sobretodo de la capacidad de comunicar para poder clarificar las expectativas a los miembros del equipo y a su vez estar abiertos y accesibles para escucharlos partiendo de un interés genuino en ellos.
Además, otro aspecto sumamente importante que tienen un impacto en la retención de los colaboradores es la confianza que los líderes pueden demostrar empoderándolos en la toma de decisiones y por medio de la asignación de responsabilidades que les permita desarrollarse y aportar haciendo la diferencia con sus trabajos.
LA EVOLUCIÓN DE LAS MEJORES
Históricamente los datos revelan avances en las Mejores 25 Empresas Multinacionales para Trabajar en el Mundo en la percepción de los colaboradores hacia su experiencia dentro de sus lugares de trabajo y en la motivación de las personas para colaborar en ellas – especialmente en los indicadores de retención -.
Esto se logra porque Las Mejores no sólo se enfocan en atraer a los mejores profesionales, sino que también se preocupan por incorporar a las personas que pueden formar parte de sus culturas y les dan un espacio para desarrollar su potencial e intereses, integrando sus valores para formarlos como profesionales y como grandes seres humanos. Son empresas que día a día mejoran millones de vidas a lo largo del mundo y se interesan en descubrir el talento de las personas y reconocer sus fortalezas, brindándoles múltiples oportunidades para que puedan ser capaces de trascender.
Considerando los cambios y volatilidad del entorno laboral, esto presenta una perspectiva prometedora y optimista porque demuestra que los excelentes lugares de trabajo tienen la capacidad de soportar los cambios y superar circunstancias inestables transmitiendo a los colaboradores estabilidad, generando reciprocidad y motivándolos a seguir cultivando más logros en equipo.
Su ejemplo comprueba que ser un excelente lugar de trabajo es una tarea alcanzable. Es un signo de fuerte compromiso por la gente y mejora continua de las organizaciones, buscando impacto en el desarrollo de la sociedad, independientemente del país, región, industria o tamaño de colaboradores. Este es un paso que apunta hacia la evolución de las compañías en aras de transformarse y reinventarse para llegar a ser organizaciones inteligentes, cada día y cada año más exitosas y más humanas.
Con todo esto se evidencia que, si las organizaciones quieren disminuir los niveles de rotación voluntaria y evitar un desequilibrio e impacto negativo en indicadores tales como clima laboral, productividad y compromiso, tienen que descentralizar el foco del negocio en lo netamente económico y empezar a poner la mirada en las personas de una forma genuina, entendiendo lo que quieren y reconociéndolos como el mayor valor de toda organización.
Jennifer Amozorrutia Amozorrutia es Gerente de Gestión del Conocimiento del Great Place to Work®México.